RELATO
¿VACACIÓN O VACACIONES?
La palabra “vacación” (así, en singular) parece que se incorporó a nuestro idioma allá por mil cuatrocientos noventa y pico. Me imagino, por las fechas que son, a Cristóbal Colón diciéndole a su mentora, la reina Isabel, algo así como: “Mira, reina, estamos en agosto y me apetece hacer un viajecito hasta las islas Bahamas –aunque primero se llamaron Guanahani-. Estoy harto de realizar navegaciones de cabotaje dando vueltas alrededor de las costas conocidas. Me apetece un crucero a lo grande. Para ello necesito tres barcos y también me llevo algunos amigos.” (¡Qué serían unas vacaciones sin los amigos!). Desde luego, a la reina le atraía el plan de Colón, pero Fernando, que era más sedentario, la convenció amorosamente para que abandonase la idea: “Deja que vaya primero Colón y luego, cuando vuelva, si vuelve, ya nos planteamos el ir de vacación también”.
Como ocurre con casi todas las palabras, este vocablo también bebe en la fuente latina (lo que demuestra que los romanos también se lo pasaban bien), ya que procede del verbo VACARE, cuyo significado es “estar vacío, libre o deshabitado” (observad, amigos/as, que de este verbo latino derivan otras palabras relacionadas con el significado original, tales como vacante, vacuo o evacuar). Al principio se utilizó, como hemos señalado, solo en singular, tal vez porque en su origen no había más que una vacación, a diferencia de hoy en día que con el turismo hemos creado numerosas vacaciones: Navidad, Semana Santa, verano… Por desgracia, hasta el contenido de la palabra se ha vaciado, porque cuando uno va de vacaciones (así, en plural) ya no hay sitios vacíos, ni libres, ni deshabitados. Eso sí, podemos quedarnos con nosotros mismos, es decir, ensimismados, y ampliar nuestra libertad y nuestro vacío con buenas lecturas, buenos paseos por las playas o por las montañas y con buenas conversaciones con los amigos y familiares, aunque sea a través del móvil y a unos metros unos de otros (de esta forma, estaremos en lugares habitados, pero con sensación de estar deshabitados -el móvil nos va acercando cada vez más a nuestras contradicciones humanas-). En cualquier caso, felices vacaciones (así, en plural) y si queréis, como hizo Colón, nos podemos ver en Las Bahamas.